02/12/2012 RUTA DEL EBRO ETAPA 15

HORA SALIDA: 7:00
PRECIO: Socios 15€ - No Socios 17€



GR99. Venta Jalón – Puente Moros

Distancia: 29,46 km
Tiempo: 6h 32m 47s
Velocidad media estimada: 4,5 km/h  (13:20 min/km)

Desnivel: -54m (Desde 372m a 318m)
Ascenso acumulado: 116m
Descenso acumulado: 154m



Comenzamos la etapa junto a Venta Jalón, en dirección este, hasta llegar al canal de Mendavia (2km), una zona de interesantes sotos (La Calderera, La Sabuquera, los Americanos, Galindo, el Tamarigal, la Veguilla…).
Seguimos el curso del río durante varios kilómetros, hasta llegar al desvío a Mendavia (15km).
DESVÍO OPCIONAL HACIA MENDAVIA: A 1 km en dirección a Mendavia encontramos la ermita de Legarda y en otro km más llegamos hasta Mendavia.
La ruta prosigue junto al río, por el soto de Urzagal.
Durante otros 8 kms seguiremos la ribera del Ebro, hasta abandonarla en Granja Imaz (23km).
Tras un pequeño tramo junto a la NA134, retornamos al río (km25) junto al que seguiremos hasta llegar al puente o acueducto de los Moros y a la presa de Los Mártires, inicio del canal de Lodosa.
En este lugar, en lugar de seguir las indicaciones del GR99 giraremos 90º a la izquierda para llegar en 5 minutos hasta la carretera NA134, en donde encontraremos un Área Recreativa, punto final de la etapa (29,5km), y donde nos esperará el autobús.


Ermita de Legarda
Sita a 1 km de Mendavia, sus primeras referencias son del siglo XI. La construcción data del XIII, con modificaciones posteriores hasta el XVIII. La nave es de dos tramos, con columnas que culminan en capiteles de hojarasca. El arco apuntado de la portada contiene relieves figurativos de animales y caballeros, entre otros motivos. En el XVIII se amplió con una cabecera barroca.

Mendavia
Los testimonios de sus primeros poblamientos corresponden al yacimiento de El Castillar (Edad del Bronce y del Hierro) y al del Cogote Hueco (posiblemente ibero). Sancho Garcés I conquistó la población hacia 910 y la convirtió en una importante plaza de armas. En la década de 1920 disfrutaba de una eficiente industria transformadora de productos del campo, y hoy cuenta con más de 3.000 ha de regadío, donde se obtienen productos, cuya alta calidad está reconocida por la Denominación de Origen Pimiento del Piquillo de Lodosa, la Denominación Específica Espárrago de Navarra o la Denominación de Origen Calificada Vino de Rioja.
En la localidad destacan el yacimiento de El Castillar, que abarca de la Edad del Bronce a la del Hierro II; la parroquial de San Juan Bautista, del XIII al XVIII; la muralla, y casas blasonadas con galería de arquillos y escudos del XVII y XVIII.

Granja de Imaz
Antiguo monasterio y actual explotación agropecuaria, conforma un interesante conjunto de edificaciones del XVII.

Acueducto de los Moros
El acueducto Alcanadre-Lodosa, levantado en el siglo II d. C. (en tiempo de los emperadores Trajano y Adriano, muy favorecedores de las obras públicas en Hispania), es una excelente muestra de la ingeniería romana. Conocida en la zona desde antiguo como puente de los Moros, se trata de una conducción de agua que transportaba su caudal desde la unión de los ríos Linares y Odrón (allí se ubica una presa romana) a Calagurris Iulia, la actual localidad riojana de Calahorra. Unos 30 km de canal construido a cielo abierto y encajado en el terreno, que medía de 2 a 2,50 m de anchura y hasta 2 de profundidad. Levantado con potentes paredones de piedra (en las curvas se recubría de mortero para fortalecer la obra) y sobre suelo arcilloso natural, sus pilares ofrecen todavía un mayor grosor (4,80 m de luz y 1,10 de ancho), que el resto de acueductos. Ello se debe a la necesidad de resistencia frente al fuerte caudal del río Ebro y sus numerosas y potentes crecidas e inundaciones. De esta forma, la canalización contaba con un sistema de compuertas o aliviaderos para regular el caudal.
En la actualidad, sólo se conservan 13 arcos de sus 108 originales. Hace 80 años contaba con unos 20 arcos, pero la intención de usar su piedra para construir una presa aguas abajo llevó a la utilización de explosivos, lo que destruyó buena parte del conjunto. Afortunadamente se abandonó la idea antes de completar todo el proyecto, y hoy día se puede disfrutar de esta impresionante reliquia.